La economía de EEUU sufrió en agosto los embates del huracán Harvey
La producción de las fábricas se contrajo 0,9%, mientras que las manufacturas registraron una caída de 0,3%. Ni el retail se salvó.
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La producción industrial en EEUU sufrió un fuerte golpe del huracán Harvey. El indicador registró en agosto una contracción de 0,9%, su primera vez en terreno negativo desde enero –cuando marcó -0,3%- y la desaceleración máxima desde mayo de 2009, cuando fue un -1,1%.
Las proyecciones tanto de Reuters como de Bloomberg apuntaban a que el sector –que incluye manufacturas, minería y plantas eléctricas y de gas- se expandiría 0,1%.
Los malos resultados se debieron principalmente a interrupciones que dejó el huracán Harvey en el suelo estadounidense, forzando a cerrar las plantas de petróleo, gas y químicos en el Golfo de México.
Además, el verano templado redujo la demanda por energía en el este, según informó hoy la Reserva Federal. A la vez, la cifra para julio fue revisada al alza, de 0% a 0,4%.
Producción manufacturera, uno de los componentes del indicador amplio, también llegó al terreno negativo, desacelerándose 0,3% en agosto por los efectos climáticos. Los expertos de Bloomberg esperaban un crecimiento de 0,3%.
La Fed advirtió que las fábricas podrían sufrir más retrasos en suministros, escases de algunos insumos y aumento de precios de estos. Sin embargo, según la institución, manufacturas podrían haber aumentado su producción si no fuese por Harvey e Irma: la producción de autos creció 2,2%, su primer aumento en cuatro meses.
Así, fuera de la volatilidad relacionada con las catástrofes naturales, se espera que las fábricas sigan expandiéndose. Sin embargo la aceleración es poco probable sin estímulos del aumento de demanda de los hogares e inversiones empresariales.
Retail a la baja
En tanto, las ventas de retail –el motor de la economía estadounidense- también cayeron inesperadamente en agosto, un 0,2%. El Departamento de Comercio señaló en un reporte especial que no podría identificar el impacto específico de los desastres climáticos sobre el indicador.
La demanda por los vehículos, que ya estaba enfriándose, podría haber sufrido un golpe por Harvey: las ventas de la industria cayeron 1,6% en agosto. Sin embargo, el indicador total excluyendo la industria automotriz creció 0,2% después de ganar 0,4% en el mes previo. Las ventas de las bencineras aumentaron 2,5%, mientras que en los restaurantes y tiendas de mueble crecieron 0,3% y 0,4% respectivamente.